Así serán los pastilleros que elaborarán las farmacias gallegas

En veinte días entrará en vigor en Galicia el decreto que regula la preparación y entrega de los sistemas personalizados de dosificación (SPD) por parte de las oficinas de farmacia. Son los llamados pastilleros, cuyo objetivo es facilitar que las personas polimedicadas, es decir, que toman varios fármacos habitualmente, sigan el tratamiento de forma correcta y así mejore su adherencia terapéutica. 

Se trata de una actividad voluntaria para las farmacias y la Xunta solo regula cómo deberán hacerlo las boticas que se adhieran a este sistema. De hecho la Xunta no aportará fondos para esta prestación, pero las oficinas sí podrán cobrar al usuario por este servicio. Los colegios consultados ya han confirmado que sí cobrarán por hacerlo. En otras comunidades el coste oscila entre 20 y 30 euros al mes. 

Y es que los requisitos establecidos en este decreto son múltiples. El personal debe estar formado en estos SPD, hacer una entrevista inicial al paciente o a su representante legal, y que este firme un consentimiento. Además habrá que controlar la adherencia al tratamiento y cualquier cambio en el mismo. Solo se podrán incluir en los pastilleros medicamentos autorizados por la Agencia Española y que estén recetados de forma crónica. Es decir, no se podrán incluir aquellos pautados para procesos puntuales. 

Lo que tampoco podrá hacerse es introducir unidades partidas, únicamente cuando no existan medicamentos autorizados con esa composición o cuando se trate de comprimidos con ranuras para fraccionarse. Tienen que ser sólidos orales y no podrán incluirse aquellos productos que tienen un requisito de conservación de entre dos y ocho grados.

La preparación será para un período no superior a los catorce días, y solo en casos excepcionales y justificados podrá excederse ese tiempo.

Varias zonas en la farmacia

Para elaborarlos la Xunta exige que haya en las farmacias un área dedicada a esta actividad, que debe dividirse en una zona de atención farmacéutica, para realizar la atención individualizada y la entrevista previa al paciente; otra de almacenamiento de los medicamentos con los que se van a elaborar los SPD; y otra zona de preparación de estos pastilleros. Este espacio, en concreto, no puede tener acceso directo al exterior ni al baño, debe de estar cerrado o claramente delimitado, y contar con una superficie de trabajo de tamaño suficiente, lisa, impermeable y fácil de desinfectar. La humedad ambiental debe oscilar entre el 40 y el 60 % y la temperatura entre 15 y 25 grados, aunque con una flexibilidad de dos grados.  

Regulación de algo que ya existe

En realidad hay farmacéuticos que ya elaboran pastilleros para usuarios mayores o que tengan problemas para seguir su tratamiento. Pero la Consellería de Sanidade no había regulado esta disposición, que se incluyó en la nueva ley farmacéutica de Galicia.