Los medicamentos genéricos permiten grandes ahorros en oncología
Un informe evidencia las grandes diferencias en el precio de estos medicamentos en Europa y la oportunidad para el recorte de la factura farmacéutica que representan. Hay ejemplos de fármacos que cuestan poco más del 1% del original.
Un informe publicado este año en la web de la plataforma de apoyo a genéricos y biosimilares GABI evidencia las diferencias notables en el precio de medicamentos orales genéricos para oncología entre 25 países de toda Europa.
Como ya contó CF, un comprimido de 400 mg de imatinib tenía un precio reembolsado en 2017 de 71,30 euros en Reino Unido, 49,25 en España y 0,92 en Polonia.
En general, los precios de los genéricos en Europa están entre un 20% y un 80% por debajo de los precios originales, aunque algunos genéricos pueden llegar a costar entre un 2% y 4% del precio antes de la expiración de la patente.
El artículo resalta el gran margen para reducir precios que existe en oncología, ya que el coste de producir algunos de los principios activos representa solo el 1% de lo que cuesta el original.
Ejemplos de precios bajos
De hecho, en Europa hay ejemplos de versiones genéricas de paclitaxel a poco más del 1% del precio del original. Otros ejemplos de precios bajos se pueden encontrar con los genéricos de docetaxel, lo que el artículo atribuye al amplio número de laboratorios que en algunos países comercializan esta molécula.
Asimismo, las grandes reducciones de precios que se han alcanzado con capecitabina, flutamida, imatinib y temozolomida vuelven a confirmar que el coste de medicamentos para el cáncer puede ser muy bajo.
Demanda de transparencia
A juicio de los autores, estos datos “alimentan el debate para una mayor transparencia en la fijación de precios de los nuevos medicamentos”, sobre todo cuando el beneficio terapéutico que ofrecen los nuevos fármacos respecto al estándar es “limitado”.
En este sentido, el artículo apunta que, aunque la mayoría de las nuevas terapias aportan un beneficio pequeño, sus precios no han dejado de crecer. El precio por año de vida ganado por los nuevos medicamentos se ha multiplicado por cuatro en los últimos veinte años sin contar con el efecto de la inflación.