Se cumple una década de la medida y los datos de Iqvia apuntan que su consumo despega tímidamente con el acetato de ulipristal (‘Ellaone’), del que un 99 por ciento se suministra en botica, frente a levonorgestrel (‘Norlevo’ y ‘Postinor’).
La dispensación de la píldora del día después sigue creciendo cuando se cumplen casi 10 años de su venta sin receta (en septiembre de 2009), cuando era ministra de Sanidad Trinidad Jiménez (PSOE). Sin embargo, su crecimiento es lento (entre un 3 y 4 por ciento en los últimos años, según los laboratorios) y debido fundamentalmente a la irrupción de la píldora de los cinco días después: Ellaone (acetato de ulipristal), de libre dispensación desde 2015, frente a la tradicional (levonorgestrel), que desciende.
Liberalización de la 'pdd'.
Trinidad Jiménez, ministra de Sanidad en 2009, junto a Bibiana Aído, ministra de Igualdad, durante la rueda de prensa que celebraron en mayo para anunciar la libre dispensación sin receta de la píldora del día después.
Así lo reflejan los datos facilitados por la consultora Iqvia, donde Norlevo y Postinor, los decanos del sector, han pasado de una época de esplendor en 2010 (con 620.000 y 77.000 unidades dispensadas, respectivamente) a un progresivo declive, a lo que ha contribuido la aparición de genéricos en 2014. Frente a ellos, Ellaone ha ido en progresivo aumento, pasando de 177.000 unidades dispensadas en 2017 a 200.000 en 2018.
Fedifar tiene datos de caída de las ventas, con oscilaciones entre el 4 y el 20 por ciento
Sin embargo, la Federación de Distribuidores Farmacéuticos (Fedifar) se refiere a un decrecimiento de las ventas globales que oscila por meses: de en torno a un 15 por ciento menos en enero de 2019 en comparación con enero de 2018, a un 4,5 menos entre febrero de 2019 y el año anterior y hasta un 20 por ciento menos en marzo.
Tomando el relevo
Pese a todo, fuentes de la industria y expertos como Isabel Serrano, ginecóloga de la Federación de Planificación Familiar Estatal (FPFE), explican a CF que la farmacia está tomando el relevo a los centros de salud y de planificación familiar ante “una falta de apoyo por parte de las administraciones”. De hecho, añade que todo depende de cada comunidad autónoma e incluso dentro de la misma autonomía hay diferencias.
En concreto, destaca la labor de los centros de planificación de Extremadura, algunos de Cataluña y la labor del Ayuntamiento de Madrid, con 13 centros, en los que sí distribuye la píldora de forma gratuita. “Lo que ocurre es que la instituciones no pueden decidir de manera global si distribuyen Ellaone u otra, porque todo depende de las ofertas que hagan los laboratorios“, señala y comenta que desde el punto de vista clínico ambas pautas tienen suficiente seguridad y están avaladas por la Agencia Española del Medicamento y Productos Sanitarios (Aemps)”, aunque haya pequeñas variaciones entre el acetato de ulipristal y el levonorgestrel”, matiza.
“Las farmacias están en todos los barrios y los centros de planificación no”
No obstante, Guillermo Seller, director médico de HR Pharmaceuticals, laboratorio que tiene tanto EllaOne como Norlevo (éste hasta 2015 era del laboratorio Chiesi), rompe una lanza a favor de la oficina de farmacia. Es más, explica a CF que el 99 por ciento de Ellaone se distribuye en farmacias, y el 1 por ciento en hospitales y centros de planificación familiar, y lo ve lógico: “Es el farmacéutico el que elige la píldora más idónea. Las farmacias están en todos los barrios y los centros de planificación no. Para una persona que tiene un accidente, el mejor acceso es la farmacia. Si no tiene recursos, probablemente sí vaya al centro de planificación”.
En cuanto a la promoción de la ‘pdd’, Seller es claro: “Llevamos mucho tiempo sin promocionar Norlevo, lo que hace que se venda más Ellaone. De hecho, recibo más consultas sobre éste”, afirma. “Lo más importante de su eficacia es que actúa cuando no lo hace el otro principio activo; es decir, cuando más probabilidades hay de un embarazo, pero tomándosela cuanto antes”, añade.
El farmacéutico debe seguir un protocolo, preguntando siempre antes de dispensar
Aun así, la frecuencia de visita a la oficina de farmacia para los anticonceptivos de urgencia depende de su ubicación. Mientras que las farmacias de Extremadura declaran dispensar una píldora a la semana, desde el COF de La Coruña explican que es de cero a una, mientras que el COF de Gerona se refiere a 3 ó 4, como señala a CF su presidenta, Rosa Núria Aleixandre Cerarols: “Será por estar más cerca de la costa”, indica, al tiempo que reclama la necesidad de concienciar de que no se trata de métodos de anticoncepción estándar, por lo que en determinados casos derivan al ginecólogo.
Es más. Serrano, de la FPFE, añade que “la labor del farmacéutico es vital, porque tiene que informar”. Y señala, como ejemplo, que una mujer debe dejar de dar lactancia a su hijo durante siete días si va a tomarse Ellaone.
En todo caso, los farmacéuticos consultados siguen siempre un protocolo antes de dispensar la píldora, de forma oral y a veces también escrita. “Es importante preguntar cuánto tiempo ha transcurrido desde la relación sexual no protegida. Si pasan más de cinco días no tiene sentido, porque no son efectivas. Y la otra pregunta muy importante es cuándo fue la fecha de la última regla, para tener cierta seguridad de que la posibilidad de embarazo es mínima, precaución que también señala la Organización Mundial de la Salud (OMS)”, explica Neus Caelles, de la Sociedad Española de Farmacia Familiar y Comunitaria (Sefac), que participó en elaborar la Guía de actuación para la anticoncepción de urgencia en farmacia comunitaria de Sefac.
De hecho, la OMS reconoce que la anticoncepción de urgencia puede prevenir más del 95 por ciento de los embarazos.